lunes, 14 de marzo de 2016

"Aquel que no conoce la Historia está condenado a repetirla".
                                                                                                   Napoleón Bonaparte.
  


Inspirada en el texto  "Enseñar a pensar históricamente" de Andrea Sánchez Quintanar quien habla de la Historia y su importancia en la vida de los  seres humanos, mediante la  reflexión teórica  y la mostración o enseñanza de esta ciencia, que en el ámbito social  ha dado forma a la base del nacionalismo constructivo y de la conciencia histórica. Además, la autora asegura que la Historia es un conocimiento vital sin el cual no es posible vivir humana y plenamente, pues las personas no están hechas de forma definitiva, por el contrario, se construyen constantemente en un tiempo y espacio determinado, llamado por Sánchez la sociedad terrenal.
Señala que el hombre es el ser humano de la autognosis, pues es el único ser vivo que tiene la capacidad de pensar sobre su propio ser, de construir y orientar su desarrollo, de discernir, de objetivar y subjetivar, de crear su propia identidad; es decir, puede darse a sí mismo un  por qué  y  para qué enfrentarse a la realidad. En consecuencia, quien escribe la Historia es un hombre que se crea a si mismo, pero en diferentes tiempos y espacios, por ello su existencia es presencia actual del pasado. Entonces, el hombre tiene la facultad de ir más allá de sí mismo y de trascender los límites de su ser físico a través de la concepción de la Historia. En este sentido, el  establecimiento de la relación entre el ser humano y su entorno (cercano o distante), despertó en el hombre la preocupación de algo más que él mismo, llamado por Sánchez la “otredad “.  

En otras palabras, porque el hombre no es sólo por sí mismo, ni es completo por sí mismo, como bien señala Platón. Por ende, es a través del análisis y la reflexión del pasado como entiendo el presente y me ubico en él,  para interpretar o tratar de descifrar el futuro, sin caer en la adivinación y en consecuencia reflejarlo en  un actuar humano compartido. Pero la Historia es un saber que concierne a medios muy amplios, sobre todo en la actualidad, y es precisamente en ese aspecto donde su estudio se convierte en una ciencia peligrosa, pues el conocimiento histórico se construye para ser difundido y en ese afán, en algunos sectores o individuos,  la conciencia histórica se pierde y los conocimientos o la información pueden ser alterados, según los intereses de algunos poderes. 

Luego de este breve análisis, me atrevo a decir que México es un pueblo sin  memoria, porque no tiene una conciencia histórica. Sucede que, desde los primeros años en la escuela, nos enseñan una Historia plagada de héroes y villanos, de ganadores y vencedores, de hechos acontecidos en algún tiempo y espacio ajeno a nosotros, pero se olvidan de explicar que esos seres  tenían sus propias virtudes,  miedos, intereses y ambiciones; que cometieron aciertos y errores, y que de sus acciones han dependido las consecuencias que vive nuestro país actualmente.

Y porque la Historia llega a muestras manos ya digerida, corregida o aumentada según la visión o los objetivos de determinados medios, poderes e incluso, desde la propia perspectiva y tendencias del profesor de la clase. Debido a la falta del profesionalismo y de la ética de quienes transmiten los conocimientos  y las verdades históricas, ya sean éstos el Estado,  los medios de comunicación o  los docentes. Todos por igual resultan ser canales  peligrosos, si no se enseña a pensar históricamente a las masas, despertando la consciencia de quienes fuimos, somos y podemos ser, porque solo dejando de formar individuos aislados e ignorantes de su pasado, se logrará crear una realidad presente, donde las personas tengan un horizonte certero de un futuro compartido en el que no se repitan los errores del pasado.

 En el caso de los procesos educativos, la difusión de la historia dependerá de quien conduzca o transmita la información y de cómo la perciba él mismo, pues en todo momento llevará un mensaje, una intención o bien una interpretación. Un historiador o cultivador de la ciencia básica e incluso un docente no debe olvidar que está obligado a decir en molde lo que en conciencia piensa.  


¿Cómo Reformar la Educación?


Observa el siguiente vídeo y reflexiona respecto a los cambios en la educación y sus repercusiones.








Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=TZSpfaiwsU0


Por ende el docente deberá evitar caer en una parcial inconsciencia, desarrollando una propia consciencia histórica, pues debe reconocer que de él dependerá la formación de otros: alumnos, muchos de ellos futuros inconscientes históricos y de la propia realidad presente. Pues desafortunadamente, algunos maestros conducen al rechazo y al odio de la Historia como asignatura, porque las estrategias que utilizan para enseñarla son poco interesantes para los estudiantes e incluso porque ellos mismos como profesores carecen de la pasión por la Historia. Lo que se requiere en una clase es reconocer que sin las enseñanzas históricas y su reflexión, estaríamos sentenciados a vivir en la ignorancia, en la apatía de la “otredad” y en el desinterés de la interpretación de la realidad, ya sea pasada, presente o futura, pues el tiempo es relativo y lo que hoy acontece, será Historia mañana.

Al respecto, uno de los principales problemas a los que se enfrentan los docentes de Historia es la incapacidad de los alumnos para situar temporal y espacialmente los hechos y acontecimientos porque a nivel de la asignatura de Geografía desconocen, incluso la ubicación de su propio municipio y en cuanto a la ubicación en el tiempo, el desfase entre antes de nuestra era y después provoca verdaderos conflictos con la identificación de los siglos, eras, edades, etc. 

Y en cuanto a la desconexión o apatía que los estudiantes tienen hacia los personajes históricos, pues los ven como “seres de papel” y no de “carne y hueso”, entonces, esta incapacidad de empatía que tiene los alumnos con las situaciones y decisiones e incluso, con la vida misma de hombres y mujeres del pasado, las perciben como algo tan lejano y ajeno a ellos que no logran comprender el contexto en el que se dieron los hechos históricos, cayendo en el juicio anacrónico.  

Y qué decir de la continuidad en la Historia tan indispensable para su comprensión; pues es casi nula en la mayoría de las clases porque los estudiantes no logran realizar los que se conoce como el “andamiaje” de Vygostky que funciona como puente entre los “a priori” (conocimientos previos) y los “posteriori” (conocimientos nuevos), tratado de comprender los acontecimiento en forma aislada y con ello caen nuevamente en la descontextualización, lo que da lugar a las famosas “lagunas mentales” que luego provocan que el estudiante pierda el “hilo” o secuencia de los hechos sin darse cuenta que cada uno de estos sucesos como consecuencia, es el origen de uno nuevo y que todos en conjunto ofrecen momentos que cambian al mundo.  

Además, los estudiantes tampoco son capaces de entender que los hechos históricos están sucediendo en su propio contexto, conocida como “microhistoria” y en el caso de México los jóvenes no pueden apreciar que los cientos de acontecimientos relevantes que se han dado en los últimos años, afectarán irremediablemente su futuro debido a las reformas legislativas y arbitrariedades en lo que respecta a los Recursos naturales de nuestro país, al control de los Medios de Comunicación y Transporte, a la Recaudación Hacendaria, al derecho a la Educación, a los Derechos Laborales y Humanos; que si bien hoy se manejan como “verdades históricas”, solo quienes han vivido en medio de esos sucesos, saben cuál es la realidad. Misma que en las siguientes generaciones leerán los estudiantes en los libros de Historia, pero esa realidad dependerá de quién la escriba y es bien sabido que serán los que ostenten el poder quienes “dictarán” lo que la población “debe saber”, ni más ni menos.

 

8 comentarios:

  1. Pili que buen blog, ame el vídeo que nos presentas tanta verdad que tiene, a pesar de que no muestra estadística en México estaos muy cerca, estamos acostumbrados a generar alumnos como productos y no como agentes emprendedores.

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  2. Es un blog con información muy interesante. Considero que los archivos adicionales son de gran ayuda por si se necesita investigar más. Gracias !

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  3. Desafortunadamente la historia siempre es vista como algo aburrido, debido a la educación tradicionalista, aunque aún con la reforma los docentes no han dado a un 100% el paso para innovar y ver desde otro punto la materia, debido a esto solo se enfocan a generar alumnos, pasarlos de nivel sin importar todo el contexto y realmente valorar lo que la asignatura proporciona.
    Felicidades por tu blog

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  4. Jeny gracias por tu comentario. Es verdad que actualmente, incluso los padres de familia están más interesados en que sus hijos aprueben la asignatura aunque no hayan desarrollado sus competencias; es por ello que procuro desarrollar las clases de Historia enfocadas a la relación que el pasado tiene con su presente y en la influencia que tendrá en su futuro para que aprendan a visualizarlo como un "horizonte compartido".

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  5. Marco, gracias por participar y tu comentario. Espero que los enlaces adicionales contribuyan al interés por la investigación, sobre todo en mis estudiantes.

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  6. Ara, gracias por tu comentario, es grato saber que somos muchos los que pensamos de esa forma y ello incrementa la esperanza de que un verdadero cambio puede darse en el sistema educativo de nuestro país.

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  7. Lamentablemente así es, lo que buscan es generar masas sólo para hacerlas sumisas y no personas pensantes, críticas.

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  8. Lamentablemente así es, lo que buscan es generar masas sólo para hacerlas sumisas y no personas pensantes, críticas.

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